Miles de personas corrientes de todo el mundo que forman Amnistía Internacional lo han demostrado pidiendo responsabilidades, desde hace más de 50 años, a quienes socavan los derechos humanos. Cuando empezamos, pocos habrían anticipado que los torturadores acabarían perseguidos como delincuentes internacionales, que la mayoría de los países aboliría la pena de muerte y que gobernantes que parecían intocables se verían obligados a responder por sus crímenes.
Hoy no hay gobierno libre de escrutinio. No hay situación sin esperanza.
Sudadera 80% algodón 20% poliéster, 280 g/m en color granate, con capucha y bolsillo canguro y serigrafiada con tintas ecológicas.
TALLA
S
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XXL
XXXL
ANCHO
53 cm
56,5 cm
60 cm
63,5 cm
67 cm
71 cm
ALTO
73 cm
75 cm
77 cm
79 cm
80 cm
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